Mundo
“Nunca subestimes lo que puedes construir con visión, trabajo duro y un corazón que no se rinde.”

Soy Paulo Bellini, uno de los hombres que ayudó a soñar en grande desde una pequeña ciudad del sur de Brasil. En 1949, junto a otros valientes socios, fundamos Nicola & Cia. Ltda., sin saber que ese taller modesto en Caxias do Sul se convertiría en Marcopolo, una de las mayores fabricantes de autobuses del mundo.
En un país donde muchos aún caminaban largas distancias o viajaban en vehículos improvisados, nosotros creímos que la movilidad debía ser un derecho digno y seguro. Quisimos construir más que autobuses: queríamos conectar sueños, personas y destinos.
Elegimos el nombre Marcopolo en honor al gran explorador, porque nosotros también soñábamos con llegar lejos. Y lo hicimos. Nuestros autobuses cruzaron fronteras, mares y culturas. Nos convertimos en sinónimo de calidad, innovación y resistencia.
Pero no fue fácil… Hubo crisis, competencia feroz, noches de desvelo y decisiones difíciles.Aun así, nunca dejamos de avanzar.
Porque cuando un equipo tiene una visión clara y no se rinde, los imposibles se vuelven rutas alcanzables.
Hoy, cada vez que ves un autobús Marcopolo en la carretera, estás viendo el resultado de una historia de fe, esfuerzo y pasión.
Y si estás luchando por tu sueño, te digo esto:
No importa qué tan lejos parezca el destino… si caminas con propósito, cada paso te acerca.
¡Tú también puedes construir algo que mueva al mundo!
¡Sigue adelante!
-Paulo Bellini